Si estás pensando en emprender seguro que has pensado en montar una tienda online. Pero… ¿por donde empezar? Vamos a ver qué podemos hacer.

Es esencial tener muy claro qué tipo de comercio queremos poner en marcha y dominar (no digo conocer, sino ser un auténtico experto en la materia) lo que vamos a vender. De nada sirve querer vender agujas de tocadiscos si no tenemos ni idea de lo que es una Ortofon Concorde.

Una vez tengamos claro lo que vamos a vender y cómo vamos a hacerlo llega el momento de elegir un modelo de plataforma de venta.

Una plataforma de venta es el corazón de nuestra tienda online. Con ella podremos gestionar fácilmente el stock si es que lo tenemos, la facturación y los presupuestos. También podremos gestionar la base de datos de nuestros clientes y ofrecerles promociones y descuentos a través de códigos promocionales que nuestra plataforma puede generar por nosotros.

Hay multitud de plataformas, pero hoy vamos a ver las cuatro principales, o las cuatro que más nos gustan en Asser:

1. Prestashop: Es quizá la más conocida de todas. Es un software totalmente gratuito, lo que nos ayudará con los gastos iniciales y además de código abierto. No confundir con sofware libre porque son dos conceptos distintos. De fácil instalación, requiere mínimos conocimientos en subida de archivos vía FTP y saber manejarse con el panel de control de nuestro hosting. Una vez instalado (hay un vídeo donde explican cómo instalar Prestashop facilmente) sólo queda subir nuestros artículos, crear unas descripciones que ayuden a nuestros clientes y las correspondientes fotos. Podemos descargar Prestashop desde su web https://www.prestashop.com/es/ y está completamente en español. Además soporta varios idiomas. Su control de stock es realmente bueno, quizá de los mejores entre estas cuatro opciones. Actualmente esta plataforma se puede conectar con nuestra aplicación contable de forma que actúen a la vez sin duplicidad de trabajo, traspasando las ventas, cobros y presupuestos a tu contabilidad sin hacer nada más.

2. WooCommerce: También de código abierto se caracteriza por ser un plugin para WordPress, por lo que si nuestra página web está construida con WordPress nos será mucho más sencillo de instalar. Está disponible en español. WooCommerce parece que posiciona mejor en cuanto a SEO entre otras cosas por la facilidad con que posiciona WordPress (Automattic, la creadora de WordPress es también la creadora de WooCommerce). Para instalar WooCommerce bastará con descargar e instalar el plugin desde nuestra web WordPress. Realmente sencillo. Además, como en el caso de Prestashop, puedes conectar tu tienda WooCommerce a nuestra aplicación contable y te ahorrarás pasar a mano las ventas y cobros desde tu tienda online.

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1. Magento: Magento quizá sea más complicada de instalar que las dos que acabamos de comentar. Y, aunque cuenta con versión de la comunidad (código abierto) también cuenta con versión Enterprise con un coste un poquito elevado: 15.000€ al año. A diferencia de las otras dos opciones no nos bastará con un hosting compartido, desde el inicio requerirá de un VPS o un hosting dedicado, disparando los costes de alojamiento. La curva de aprendizaje también es mayor y requerirá de más esfuerzo por nuestra parte. Lo cierto es que Magento está pensado para grandes proyectos y comercio online de alta demanda. La web es http://magento.com

2. OsCommerce: El decano de las plataformas de comercio online. Nace en el año 2000 y lo cierto es que está desfasado y, aunque su instalación es muy muy sencilla, es muy muy básica y requiere de muchos plugins para montar una tienda online con unos mínimos de calidad. Quizá la opción menos recomendable de las 4 por su antigüedad y desfase, aunque se muestra muy estable y potente. La web de OsCommerce es https://www.oscommerce.com
   

Hay muchas más plataformas, sobra decirlo. Unas Open Source o código abierto, otras privativas… Elige la que más se adecúe a tu proyecto y a tu presupuesto y no escatimes gastos en hacer una buena página web, porque es tu presentación al mundo y la primera impresión, ya lo sabes, es la que queda.

Esperamos que te haya servido de ayuda. Y si es así, comparte a quién pueda interesarle. Te lo agradecemos.​